Uno describe como experiencias placenteras, el comer, el dormir, el compartir con los amigos, pero si hay un acto que está en la punta de la pirámide es el sexo, intimar con quien te agrada, darle un experiencia a cada uno de los sentidos, luces encendidas, perfume sin alcohol, mordiscos profundos, suaves sábanas de piel y susurro inesperado. Tratando de acercarme al deleite corporal emprendí una estrategia de marketing aplicada al negocio turístico, mi deseo no era atraer clientes que...